- ¡Adoro el rojo! Es el color favorito de mi princesa y también el mío pues, cuando estamos solas las dos en nuestras sesiones, ella me hace algunos cortes pequeños con mi propia daga y empieza a succionar de manera irresistible. Amo cuando pinta su rostro y sus manos con mi flujo carmesí haciendo que “limpie el desastre” con mi lengua… creo que haré lo mismo contigo ahora, ¡Mmh! – repite mientras va mojando las piernas y la cadera de la rubia con su misma sangre. Acto seguido, empezó a lamer haciendo a la viajera querer ir al baño a vomitar.
Una vez que se cansara de succionar, baja como un relámpago y saca un botiquín de primeros auxilios. Prepara un ungüento, unas vendas y gasas para curar tan rápido como pudo la Herida pues estaba empezando a manchar la madera de abedul de tinte carmesí.
- “Deja de moverte ¡demonios! Estás manchando el piso de sangre. No querrás que tu Ama tenga problemas si alguien descubre nuestro cuarto privado, ¿verdad?”… ¡Aah!, esas fueron las palabras de mi señora para mí la primera vez que jugamos en el Filth Rom, aún conservo algunas cicatrices de aquel encuentro pues fue verdaderamente salvaje.
(Al parecer, los encuentros con la rubia ojiazul llegaban a un nivel de depravación tal que tenían incluso un botiquín preparado con medicamentos por si “se les pasara la mano” al jugar entre ambas)
-aah… c- cómo… ¿cómo puedes?... ouch… - La líder de FHS apenas podía hilar las frases por el dolor y la adrenalina.
-Te falta mucha práctica para llegar a mis talones, mísera novata ¡jejeje! Las primeras sesiones no pude soportarlas, lo admito, pero con el tiempo y sus amorosas caricias hacia mí fui controlando el dolor de mi cuerpo. Bueno, voy a tener que darte un par de “presentes de bienvenida”… ¡este es el primero! – decía limpiando la sangre de la rubia que quedó en sus labios con su lengua.
La toma de su cara y le dio un beso lleno de lujuria metiendo su lengua en su boca cálida haciéndola perder el aliento durante varios minutos que parecieron horas mientras enrollaba sus piernas alrededor de la cadera de Hasuki, “haciendo palanca”, profundizando más el beso.
-es la primera vez que te besan, ¿cierto? Oh, Eres un tesoro de los dioses… ¡y toda para mí! – decía con gesto malvado y lujurioso mientras estaba debajo de Hasuki acariciando su cabello y lamiendo su cara.
-Por favor, queremos irnos. – empezaba a tener miedo y malestar general
- ¿acaso no has entendido que te quedarás a mi lado para siempre? – le sujeta el rostro de modo rudo
-no pienso hacerlo. – le responde.
- ¡sabía que dirías eso cariño! Bueno, como la gran duquesa del rose Garden Orphanage, tengo el poder para darte mi segundo presente. Dime amor, ¿cómo se le llama en noruega a un narrador? Dilo si no quieres ganarte otra puñalada. – la amenaza colocando su daga en la tráquea amenazante – como no deseas jugar como yo quiero te voy a obligar, antes de conseguir tu amor tendré tu respeto como la cierva sucia que eres.
Sabía por el tono de su voz y sus arrebatos que no bromeaba, podría hacerle daño si no accedía a sus deseos, así que tuvo que seguirle el juego.
- “¡fortelleren!”. – dice con gesto de miedo y dolor por sus heridas.
-Ahora dime, ¿cómo se le llamaría si tuviera un título nobiliario? Un rey, por ejemplo.
- “kongen historieforteller”, el rey narrador de cuentos.
- ¡eres maravilloso, mi amado! De ahora en adelante, serás llamado El Príncipe de la máxima creatividad, el príncipe creativo o como quieras llamarte. – la abraza de modo fuerte.
- El príncipe narrativo… “fortellingen prins”. – escoge el nombre para que la chiquilla parara de tocarla, no le agradaban sus caricias y modos.
- ¿prins? Me suena a nombre de caballo y eso me acaba de dar una idea. – la duquesa ríe maliciosamente mientras se retira de la cama.
Sin decir una palabra, la pelirroja de 14 años obliga a la rubia a colocarse boca abajo aumentando el dolor del hombro y los azotes de la fusta esparcidos por todo su cuerpo. El vestido le fue quitado quedándose solamente con su blusa, su ropa íntima y las calcetas. Entonces, se sienta cómodamente sobre su espalda y como la rubia estaba atada de pies y manos no lo pudo evitar. De modo triunfante le coloca un collar de color café en el cuello junto a una cadena que ató a la cabecera inmovilizándola por completo, curiosamente dicho collar combinaba bien con la fusta.
-Sería una burrada darte “mi collar” pues es solamente mío- dice al sujetar su corbata verde-. Mi señora me lo dio como símbolo de mi obediencia hace 3 años atrás junto con mi rango aristócrata, así que he conseguido uno para ti ¡jejeje! Está hecho de piel y es muy básico, pero su función es la misma.
-Entonces, ahora sé por qué razón logró enredarte en ese abismo de perdición tan fácilmente: ¡solo tenías 11 años de edad! – dijo la chica sacando conclusiones totalmente correctas y, ciertamente, dolorosas para el que las oyera.
- ¡te equivocas, estúpida! Yo decidí voluntariamente a ser suya desde el mismo día en que llegué al Rose Garden Orphanage Hace 5 años.
-S- solo... ¿Solo tenías 9 años? - El nórdico mal puede acreditar en las palabras de Diana Hyde.
-Ella es la más importante persona en mi vida después de mi padre y de Clare. Ella intentó salvarle, ella me aceptó aquí, me dio su amistad y cariño… ¡ella es la dueña de mi vida! Como ves mi querida invasora, conozco mucho mejor a mi señora de lo que el maldito Hoffman cree conocerla. Dejemos por la paz esta interesante y obvia plática para pasar a la acción, ¿quieres? Jejeje.
Grita al sentir el peso de la chiquilla sobre su maltrecho cuerpo, sus heridas aun ardían mucho.
- ¡cabalga! Muévete más rápido o vas a recibir la caricia de mi hermosa daga de nuevo y será más profundo que antes.
La noruega, con mucho esfuerzo y un agudo dolor, empieza a mecer su cuerpo de atrás hacia adelante imitando el trote de un caballo.
- ¡sí!, ¡sí! Más rápido mi príncipe, quiero que digas cada palabra en tu idioma, mi lindo caballo, mi pequeño Prins… ¡dímelo ahora! Di que eres “mi lindo caballito”, “mi corcel”. – grita eufórica dándole fustazos nuevamente.
La noruega le responde en su idioma materno (noruego) con tal de que el ataque a su persona no sea tan brusco, su cuerpo ardía en llamas por tanto dolor.
- “søt hest”, “liten hest”.
- “soy tu corcel en todas las batallas”. – dice Diana exigiendo que repita la misma frase, pero en su lengua nórdica.
- “din fengsel i alle kamper”– Hasuki responde lo mismo que dijo. Era humillante.
- “no puedo vivir sin ti ni tu fuerza, dómame ya que soy tu yegua salvaje”. – Heleen se niega a oír sus ruegos.
-no, ¡basta ya! – se niega, no estaba dispuesta a humillarse
- ¡Dímelo AHORA! - Responde con un fustazo directo a la herida de su hombro la cual ya tenía una gran hinchazón que se tornó entre azulosa y violeta.
- “soy tu esclavo, tu ciervo y tu príncipe”… Esto es muy divertido, ¿no crees amor? Jajaja.
- “jeg er din slave, din tjener og din prins" - dijo en un susurro impotente.
La ojiverde estaba a punto de llorar por tan humillante situación, pero entonces logra recordar la razón del porqué estaban ahí, el porqué de su viaje: su pequeña, su “hija” Kasi. Esto la hace recobrarse y con renovadas fuerzas empieza a moverse al ritmo que le exigía su torturadora con el fin de poder complacerla y lograr salir de esa casa por fin al día siguiente.
- “no debo rendirme, es por el bienestar de mi ángel" – pensaba entre punzadas de dolor.
Se mece rápidamente como si fuera un caballo, de atrás a adelante, sintiendo que se iba a desmayar por el dolor punzante en todo el cuerpo, la pelirroja empezó a darle pequeños golpes en sus costados con el talón de su pie derecho lo que agregó dolor en las costillas.
El cruel tormento se alargó durante 40 agonizantes minutos y finalmente, la noruega se desplomó sin fuerzas sobre la cama de nueva cuenta, ya no tenía fuerzas para incorporarse. Respira sumamente agotada.
Sintió un gran escalofrío en su espina dorsal al sentir que la malvada chica empezó a recorrer su espalda parcialmente desnuda con las manos, primeramente, después empezó a rasgarla con las uñas haciendo surcos en su carne y principalmente en los pinchazos que cubrían todo el hombro derecho hasta el Omóplato, aunque la sangre había parado de fluir por un momento, la acción de los surcos volvió a abrir la herida, como si a Diana le encantara verla sangrando, como si fuera una hoja de papel que pintara con un crayón rojo. La nórdica emite un gemido ahogado, el dolor de su herida se hacía cada vez más obvio y sería peligroso dárselo a saber a la pelirroja.
-Kasi... Mi niña, ¡esto es por ti, hija! - Dice por último mientras que una lágrima se desliza por su mejilla y se funde con la almohada única que había.
<…………………….>
Área de dormitorios, segunda planta.
La criatura se revolvía entre las sábanas blancas que le colocara su madre amorosa para que pudiese descansar. Estaba literalmente destrozada por el cansancio, el estrés de haber pasado por Vamphiria y luego las extensas y áridas zonas de Prideland y, ahora, estar rodeada de aquella energía brumosa, como una nube de baja altitud cargada de electricidad estática que le molesta significativamente por su pelaje rosado. Sencillamente no podía conciliar el sueño.
Mueve su cuerpo, se sacude como un cachorrillo que se ha revolcado en las hojas secas de un frondoso jardín. Irónicamente, el lugar donde se hallaban era una lúgubre mansión llamada Rose Garden (Jardín de Rosas). Levanta su cabeza para ubicarse y recuerda que estaba en el dormitorio de la mansión sobre una litera en la parte baja, siente el sabor de la leche tibia que “su tío Mario” le había servido calentando su estómago. Esto contribuye a aumentar el sopor del sueño inminente y se vuelve a recostar en las tibias sábanas. Pero, al estar a pocos segundos de dormir... ¡Ese chií se hace omnipresente de vuelta!
Como pudo, la criatura adolescente se levanta y pega una de sus orejas peludas en el muro donde estaba recargada la litera. Logra sentir esa energía del otro lado del muro, era extraño pues parecía que, en cuanto ella pegase su oído, dicha bruma dejó de moverse... ¡como si supiera que le sentía!
Se desplaza de un lugar a otro, como alejándose de donde la lycan estaba. Ella empieza a seguir el rastro que deja, como un caracol que deja un rastro de baba en el piso para poder deslizarse.
- "Puedo sentirte, ¿quién eres?" - dice la criatura con voz débil y adormecida por el sedante que Tour le inyectara en el brazo para poder dormir más cómodamente. No obtiene respuesta.
Se levanta y sigue el rastro de esa energía que empieza a alejarse del lugar entre los muros del cuarto. Este era amplio con 10 literas más, una mesa larga al centro y dos puertas de acceso al interior del mismo con un enorme closet de varias secciones, quizá para la ropa de dormir de los huérfanos que vinieran o que estuviesen antes de los llamados aristócratas.
- "No me temas, puedo sentir que no eres malo, solo dime quién eres. ¿Te estás escondiendo?" - pregunta en dirección al muro en donde se hallaba un espejo largo de marco de plata y un par de pinturas de paisajes y de personas. Guarda silencio y utiliza sus sentidos, menea sus orejas buscando esa señal, ubicándola, y entonces, da con ella. ¡Estaba detrás del cuadro de un hombre con traje negro y bombín con un clavel en la solapa!
La adolescente finge tirar algo al piso y se inclina para levantarlo, entonces, sin perder un segundo, da un gran salto utilizando sus brazos y piernas como un cuadrúpedo, como una leona al cazar un ñu salvaje de las praderas y llega en unos segundos al marco de la pared. Recarga su cabeza en el marco y siente esa energía muy claramente, justo tras el muro tapizado de papel tapiz blanco con flores.
- "No, no te alejes de mí, puedo sentir algo en ti, como si tuvieras miedo... ¿por qué?" - Kasi dijo y Una vez más no hubo respuesta.
Miró al marco y pudo notar que tenía huecos en donde estaban los ojos del hombre de bombín. Al ver los huecos agudiza la vista y al girar un poco la cabeza se percata que tras la pared había un área más allá, como un pequeño pasillo. La energía se escabulló a través de este.
- ¿qué pasa aquí? No entiendo que es lo que sucede en esta casona y no tengo tiempo de averiguarlo. Estamos prisioneros por causa de estos niños, ¡No debo permitirlo! - La lycan dice para sí misma y así lograr despejar su mente del sueño que aun la invade. Se dirige a la puerta de salida del dormitorio a buscar al resto, no puede darse el lujo de descansar ahora con la inminente amenaza de Hyde hacia su madre.
(Sonido de picaporte)
- ¡Cerrado! - Dice ella y busca las llaves del dormitorio, quizá fue el doctor Sembe quien cerró por fuera para evitar que saliera de ahí. El hombre la conocía bien y sabía que lo iba a intentar pues la lycan era muy obstinada en ciertas ocasiones. Podría romper el cerrojo de la puerta, pero no podía hacerlo pues era una casa ajena y el señor Hoffman podría molestarse. Se sentó en el piso de concreto.
- ¿qué hago? No puedo romper el cerrojo ya que Kogane se molestará conmigo. No hay ventanas tampoco... ¿qué hago? - rasca su cabeza y la menea de un lado a otro para despejarse, la fórmula Dalai corre por sus venas como un rio bravo haciendo que su cuerpo empiece a relajarse poco a poco para entrar de nuevo al sueño profundo y reparador que necesitaba desde hacía varias horas... ¡pero no era el momento!
Se recarga en el muro donde estaba el cuadro del caballero del clavel para sentir los leves rastros que dejó la energía que estaba del otro lado e intentar despertarse un poco y seguir buscando algo que le permita salir de ahí sin la necesidad de romper la puerta. Rasga el papel tapiz que cubre el muro, muerde sus dedos para sentir algo que logre distraerle del sueño; No puede más. Simplemente se deja caer al piso duro de cemento gris, empieza a bostezar y cierra sus grises ojos lentamente, rindiéndose al sueño.
Escuchó las pisadas en el Hall, pasos en el despacho del dueño del Garden, siente la energía delicada y suave desvaneciéndose lentamente del muro tapizado y, finalmente, pasos delicados aproximándose hasta ella... ¡alguien entró!
No sabía si eran sus nervios o por la fórmula, pero por más que intentaba, no podía sentir el chií de quien había entrado. En ese momento supo exactamente quién era. La única persona que logró burlar sus agudos sentidos sensoriales, la única que logró sorprenderle e inhabilitarle durante varios minutos que, si fuera un enemigo peligroso (como Counji o cualquier otro de sus enemigos en Shogan), pudo haber aprovechado para lastimarle e incluso eliminarla.
- ¡Anne! - Susurra somnolienta.
-Hola... - La condesa fría dijo secamente mientras le veía desde arriba.
……………………
Escaleras del piso inferior, área del sótano…
El húngaro Jack junto a su mejor amigo Herma Sudoroi de origen japonés se encuentran ocupados (y obligados) “a jugar a las escondidas” con los 4 niños restantes y más pequeños del lugar que son Amanda, Susana, Olivia y Thomas. Están escondiéndose en el piso inferior con los dos jóvenes que los buscan para atraparlos, no es tan fácil como parecía en un principio y son como agujas escondidas en un inmenso pajar de muchos pasillos, pero casi sin puertas por su salud mental xD
Los chicos empiezan a caminar por los pasillos inferiores buscando pistas de los chiquillos, dan muchas vueltas y abren puerta tras puerta sin detenerse y entre broma y broma logran encontrar unos cuartos de gran tamaño.
- ¡ya era tiempo! Por barrabás – dice el húngaro -, lo que daría por tener una motosierra o de perdida Una lanzacohetes clase dios en las manos, oh “San Richter” ¡yo te invoco para que tires esta mansión ahora! XD
De pronto, los muchachos escuchan un golpeteo en el piso, se escuchaba como una especie de trote, como si fuera algo que caminara en 4 patas.
- ¿escuchaste? – dijeron los amigos a la vez.
Herma pone su oreja izquierda en el piso de madera que había, no estaba alfombrado como el resto de los pasillos de arriba, lo que quería decir que casi nunca frecuentaban este lugar quizá por ser muy oscuro, húmedo y un poco aterrador para cualquier niño, Jack se inclina junto a su compañero para escuchar a la vez, se escuchaba el andar acolchonado de algo que caminaba a 4 patas dirigiéndose a donde estaban ellos justamente.
Se levantan y corren a ocultarse en un área poco iluminada del pasillo oscuro y pudieron escuchar, además, el tintineo de algo metálico junto al galopar de lo que se aproximaba a ellos rápidamente. Al prepararse para la pelea se dieron cuenta de que un labrador de color dorado se aproximó a los chicos olfateándolos con curiosidad alejándose de ellos al “rastrear” algo en el suelo, era un bollito, el can toma el panecillo entre sus dientes y sale tratando hacia otro lugar.
- ¿Un perro aquí? No sabía que tenían perros en el Garden, quizá sea del señor que murió, el señor Wilson - Herma dice confuso.
-Bueno ese, hay que seguir rascando hasta dar con esos escuincles - señala el de Hungría al salir ambos de su escondite de cajas de despensa que olía a especias.
-Hay que separarnos como dijimos Man, esas ratillas quizá hayan hecho lo mismo y nos están buscando...
Después de vigilar que no había un alma en ese momento, ambos empiezan el trazado de la estrategia a seguir para ver cuál de los 4 niños sería el primer capturado.
- ¿L'aboyle, quizá? Ella tiene el arma más peligrosa Man, será mejor atraparla primero a ella y Olivia será la siguiente ya que es muy fácil capturarla pues no corrió muy rápido cuando ambos bajamos aquí - Herma dice.
-No sé, "Manda" se ve más canija que los otros y es un poco más fuerte que ellos 3, recuerda que pelearon a puño limpio todos en el Hall antes de que peláramos gallo de ahí y, a pesar de que sí le dieron varios golpes, la gordita pudo vencer a Xavi y nich con relativa facilidad. Será más fácil neutralizar a "la líder" primero. O, ¿qué tal Thomas? Es el más pequeño después de "Oli", me perece que será sencillo ya que así les reduciremos sus posibilidades de escapar u oponer resistencia - Jack plantea.
-Tengo una idea- dice "el Japo"-, ¿porque no atrapamos a dos a la vez? Tú agarras a Mandy junto a Tommy y yo apaño a L'aboyle junto a Oli y así será más fácil. Eso sí, tendremos que planear una buena estrategia ya que no son fáciles de engañar, se nota.
- ¡Juega al loto! Yo voy por la gringa y por Zorba (el griego xD) y tú te me lanzas a pescar a la "tragaldabas" y a Oli - Jack señaló confinantemente.
Chocan puños en señal afirmativa separándose ambos a izquierda y derecha del húmedo sótano. No se dan cuenta de que, entre los rincones más oscuros y escondidos, una figura negra sigue sus movimientos cautelosamente... ¡Alguien los observa!
continuará...
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