História Mi Mundo - Capitulo 13

Me levanté temprano y fui a correr con Lio. Las olas esta vez sí estuvieron muy buenas. Ya era hora de regresar así que Lio me llevo a la universidad. Cuando entramos al estacionamiento vimos un tumulto de gente.
–Qué pasa ahí?- Me preguntó.
–No sé, pero esos son algunos del equipo.- dije al ver a Agus.
–Ahí está Karol con Ruggero.
–Qué raro que andén por acá. ¿Qué habrá pasado?
–Ni idea.
–Bueno yo me quedo acá. Nos vemos más tarde no?
–No, no voy a poder. Mi papá me ha llamado y quiere que vaya a su oficina.
–Tu papá?- me sorprendí, ya que los padres de Lio están divorciados y él no se lleva nada bien con su papá.
–Sí, mi papá.
–Y para qué?
–No lo sé, supongo que lo descubriré mas tarde. Yo te llamo.
–Ok, suerte.- me incliné y lo abracé. Solo yo sé lo difícil que es para él encontrarse con su padre.
–Gracias.- me dijo al oído.
–Sabes que puedes contar conmigo, si me necesitas me llamas.
–Listo, anda a tus clases.- me bajé y me giré a ver como el carro de Lio desaparecía. Estaba a punto de voltear cuando sentí dos fuertes brazos rodearme por la cintura.
–Cada día te superas a ti misma, hasta toda empapada y oliendo a agua salada eres hermosa.- me dijo Mike apoyando su cabeza sobre uno de mis hombros mientras acomodaba sus brazos en mi cintura.
–Y tú cada día te superas haciéndomela más difícil.
–Gracias, ya quiero que te termines de convencer de que soy una buena opción.
–De eso estoy convencida.- dije girando para verlo a los ojos.
–Epa epa epa, y no son novios todavía? Son alguna clase de amigos con derechos?- grito Ruggero que tenía bien agarrada a Karol por la cintura. Se escucho la risa de Karol y Agus, y los murmullos de todos los demás. Michael me dio un tierno beso rápido en los labios y me soltó agarrándome la mano.
–Eres un idiota.- dijo caminando hacia todos ellos.
–Sí lo soy!- dijo orgulloso besando a Karol en la mejilla.
–Sí que lo eres.- le respondió ella con un beso en los labios.
-¿Qué haces acá?¿Y Caro?- Le pregunte a Karol.
–Rugge me fue a recoger, Caro ya debe estar por llegar. Y estamos acá porque están arreglando el estadio porque se viene el campeonato, entonces los entrenamientos serán en otro lugar y estamos esperando el bus.
–Tú también vas a ir?
–No no, solo ellos. Solo que vendrán tarde así que ya no lo veré.- dijo apretando los cachetes de su novio y dándole besos.
–Ah ok. Yo me tengo que ir a cambiar. Nos vemos en el almuerzo.
–Ok.
–Te acompañó?-me dijo Michael.
–Si acompáñala a cambiarse “Miki”, seguro necesita de tu ayuda.- dijo un chico del equipo burlándose. Karol lo fulminó con la mirada y Agus agarró de los hombros a Michael que estaba con los puños cerrados y a punto de lanzarse encima del chico.
–Déjalo así Michael. No vale la pena.- dijo Agus y Michael al instante se relajó y se giro para verme.
–Y tú cállate la boca o quieres terminar realmente adolorido?- agregó Agus mientras Michael me jalaba hacia el gimnasio.

Me sorprendí muchísimo ya que no conocía ese lado de Michael, él estaba por echar fuego y fue todo por un simple comentario al cual no le tome importancia. Caminamos en silencio y esta vez no me tenía agarrada de la mano, él caminaba adelante con el cuerpo realmente tenso y sin voltear a verme. Llegamos a la puerta del gimnasio y giró a encararme y pude ver por primera vez ira en sus ojos . Era simplemente hermoso, era un miel intenso y con unos ojos entrecerrados perdidos en el espacio. No pude contenerme y jalé de su chaqueta hacia mí plantando un beso en sus labios. Sentí como su ira se desvanecía con el beso. Me separé de él y le susurré en los labios.
–Eres jodidamente sexy cuando te molestas.
–Tú sí que estás loca. Te acaban de insultar, estaba a punto de matarlo y tu estas así como si nada hubiese pasado.
–Ya estoy acostumbrada a que me fastidien, simplemente no les hago caso. Lo hacen para llamar mi atención y no se la merecen.
–Te juro que no te entiendo.
–No trates de hacerlo. Ni yo me entiendo.- dije robándole un beso.
–Lo iba a matar.
–Si me di cuenta. Tendrás que acostumbrarte eso pasa a menudo.
–Yo no soy tan controlado como tú. A mí me molesta algo y simplemente me molesta.
–No te imaginaba como el peleón de la clase.
–No soy peleón, soy explosivo. No me controló cuando algo me fastidia. Me pasa a menudo en los partidos de futbol.
–Mira tú, no conocía ese lado tuyo.
–Y te gusta este lado mío?- me dijo con una sonrisa picara.
–Si cada vez que te pones así te ves igual de sexy que hace un rato, me encanta este lado tuyo.- Él se rió.
–No puedo creer que hayas dicho eso.- siguió riéndose y tomó un respiro para poder hablar. –Eres tan diferente, cualquier chica se hubiese traumado al verme así y a ti solo te importa que tan sexy me veo.
–No tiene nada de malo que te hayas puesto así, hubiese sido raro que no te cause nada si se meten conmigo.- él me sonrió.
–Bueno yo me tengo que ir a esperar el bus. Supongo que ya no nos veremos hasta mañana.
–Supongo que sí.
–Vas a ir a la fiesta de Ruggero no?
–No lo sé, había quedado hace unos días para ir el sábado a las playas del norte a practicar windsurf con Lio. Y ya tenemos la reserva de las velas y todo, si voy no me levantaré.
–Pero te vas temprano.- me miró con suplica.
–Si quieres yo te regresó a tu casa.
–No te quedarás en la fiesta?
–Si tú te irás no vale la pena quedarme. Dale vamos.
–Ok. Pero solo un rato.
–Perfecto.- me sonrió.
–Me voy, ya debe estar por llegar el bus.- me dio un beso en los labios y se fue. Prácticamente nos tratábamos como una pareja, y en realidad no me incomodaba ni me aburría. Él solo esperaba mi confirmación para anunciarlo y gritarlo a los cuatro vientos, ya que igual me trataba como su novia. Me bañé y fui a mi clase. Nos mandaron un trabajo grupal, así que tuve que sociabilizar con mis compañeros para buscar grupo. Se me acercó un castaño de ojos verdes.
–Hola! Tienes grupo? Porque a nosotros nos falta uno.- Alce mi mirada para ver al grupo y eran puros hombres. Gire para ver el salón y todos ya estaban agrupados así que no me quedaba otra opción.
–No, no tengo grupo.
–Ah perfecto, entonces te unes?- me preguntó sonriendo.
–Sí claro.
–Me llamo Máximo, pero dime Maxi.
–Yo soy Valen.
–Listo Valen, ven para que te presente al resto del grupo para ver bien como haremos con el trabajo.
–Ok.- me acerque al grupo de chicos y todos me miraron de arriba a abajo. Maxi era muy agradable y natural pero los otros de los cuales ya ni recuerdo sus nombres eran unos completos idiotas. El trabajo consistía en hacer una remodelación de una iglesia. Era un proyecto que duraría todo el ciclo, así que tendré que acostumbrarme a sus presencias.
–Bueno, como empezamos?.- dijo Maxi tomando asiento. Me senté en la carpeta que estaba a su lado.
–Primero decidamos que iglesia vamos a remodelar para decirle al profesor.- dije.
–Yo conozco una iglesia que queda por el bosque y es bastante grande, así que tendríamos mucho espacio.- dijo uno de los chicos del grupo.
–Perfecto, de que iglesia hablas?- le pregunté.
 –Se llama creo que “Buen Pastor”. Se la dirección, así que yo ahora le digo al profe para separarla.
–Listo, anda dile ahora.- le dijo Maxi empujándolo.
–Ya entonces, tendríamos que ir a la iglesia para verla y ver si nos podrían dar los planos o algo.- dijo otro chico.
–Si si, día de semana esta complicado ya que tenemos diferentes horarios. Sábado está bien para todos?- preguntó Maxi. Todos los chicos asintieron.
–Tú Valen? Normal el sábado?
–Pero que sea en la tarde.
–Ya listo. Apuntemos la dirección y nos encontramos ahí a eso de las 4 el sábado.- Apunte la dirección.
–Listo chicos, ya todos tienen su iglesia. Empiecen con el trabajo desde ahora, para que les alcance el tiempo. Se pueden retirar, nos vemos la próxima semana.- el profesor salió del aula y me paré para retirarme.
–Bueno, yo me voy. Nos vemos el sábado.
–Chau Valen.- dijo Maxi. Le sonreí y me retiré. Fui a mi casillero para dejar mis libros y me encontré con Caro.
–Hola loca, como estuvieron las olas?
–Hoy estuvieron buenas.
–Cuando es el torneo?
–Es el próximo fin de semana.
–Ya no falta nada.
–Sí, ya estamos muy cerca.- Caminamos hacia la cafetería. Y Karol estaba sentada con todas las chicas del equipo. Nos hizo un gesto para que nos sentemos a su lado. Las chicas nos saludaron y siguieron con su conversación.
–A quien vas a llevar a la fiesta? Cuéntanos.- le decían algunas chicas a Ana.
–Estoy en eso chicas, solo puedo decirles que es un bombón.
–Estas en eso? No aceptó tu invitación?- dijo Chiara entre risas.
–No es que no haya aceptado. Se está haciendo el difícil, pero va a caer.- dijo Ana con una seguridad inmensa. Yo sabía que hablaba de Lio ya que él me había contado ayer que ella lo había invitado a una fiesta. No pude contener la risa al sentir la seguridad de Ana, ya que ella creía que tendría todo bajo su control.
–Karol, cuando es el cumple de Rugge? Es el mismo viernes?- Le preguntó una chica.
–No, su cumple es el domingo.
–Y porque lo celebra el viernes?
–Es que su familia no vive en la ciudad, así que le han preparado un almuerzo familiar para el domingo.
–Ah ok. Y tú vas a ir?
–Sí, el sábado en la noche sale nuestro vuelo.- Caro y yo nos miramos extrañadas. Al parecer ninguna de las dos conocíamos el plan de nuestra hermana menor. No me gustó enterarme de todo al mismo tiempo que las chicas del equipo, y al parecer a Caro tampoco. Las chicas del equipo estaban emocionadas y compartían comentarios hacia Karol que estaba muy contenta. Caro y yo no dijimos ni una palabra en todo el almuerzo y Karol al parecer notó nuestra incomodidad. Acabamos y nos pusimos de pie.
 –Bueno yo me voy a clases.- dijo Caro
–Vamos Caro, nos vemos chicas.- caminamos hacia la puerta.
–Hey! Espérenme. Que les pasa?- preguntó Karol que venía corriendo para alcanzarnos. –Porque se portaron asi en la mesa?
–Estás loca Karol. Tú crees que nos gusta enterarnos de tu vida y de tus planes al mismo tiempo que esas chicas.- dijo Caro realmente molesta y señalando con dirección a la cafetería.
–No creo que tenga que pedirles permiso a ustedes. Yo hable con mamá y me dejo y punto.- dijo Karol sin importancia.
–No es que nos tengas que pedir permiso Ka. Simplemente que es incomodo enterarte de algo tan importante al mismo tiempo que ellas.- dije.
–No sean celosas, ellas son mis amigas. Y recién ayer hable con mamá y Rugge compro mi pasaje en la madrugada.
–Entonces te irás con tu nuevo novio a conocer a su familia? Acaso ya se van a casar?- preguntó Caro, ya más tranquila.Karol se rió.
–Técnicamente no es tan nuevo, ya salíamos hace un buen tiempo. No nos vamos a casar.- se quedo pensativa. –No por ahora.- agregó sonriendo.
 –Estas demente, irte a conocer a su familia? Es muy chapado a la antigua.- dije riéndome.
–Sí lo sé, pero la familia de Ruggero es muy formal y me han invitado. No puedo negarme, quiero hacer las cosas bien.
–Hablas como una vieja. Lo único que te diré es que no quiero ser tía aun.- dijo Caro con mucha seriedad.
–Y yo menos, no me veo cargando un bebe.
–Son unas idiotas. Nos vemos a la salida.